Aunque tiene el mismo tamaño que un CD, el formato que viene a reemplazar el DVD permite almacenar hasta 50 GB de datos, y varias horas de video de altÃsima calidad. TodavÃa le falta, sin embargo, para popularizarse
Cuando en 2002 se creó la Blu-ray Association, su misión era clara: fomentar el desarrollo y difusión del formato de almacenamiento óptico creado por Sony, Philips y Pioneer, entre otros, llamado Blu-ray, que permitÃa la distribución de video de alta definición en un disco óptico del tamaño de un DVD. En 2006 se definió la versión final; para entonces ya se vendÃan televisores con pantallas de alta resolución, en el hemisferio norte la televisión digital terrestre de alta definición aparecÃa en el horizonte, y se perfilaba un contendiente: el formato HD DVD, impulsado por Toshiba con el aval del Foro DVD, la entidad que agrupa a los propulsores del DVD convencional. Ambos usan un láser azul/violeta, de una menor longitud de onda que el del DVD; esto, sumado a una mejor tecnologÃa de compresión de datos, permite almacenar 25 o 15 GB de información por capa, según se trate de un disco Blu-ray o HD DVD.
Durante los últimos dos años, la industria cinematográfica y los fabricantes de equipos tomaron partido por uno u otro formato. Esto frenó las ventas, ya que los usuarios no querÃan apostar por un formato de corta vida, como sucedió en la década del 80, cuando el mercado oscilaba entre el VHS y el difunto Betamax. Una primer solución apareció con la promesa de varios fabricantes, sobre todo Samsung y LG, de desarrollar dispositivos hÃbridos, es decir, capaces de leer discos Blu-ray y HD DVD.
No fue necesario llegar a ese punto: el inicio de este año terminó con esa denominada guerra de formatos. Hasta entonces, las ventas estaban parejas, y el mundo del cine estaba dividido según los estudios que apoyaban a uno u otro formato. En enero, durante la exposición Consumer Electronics Show, en Las Vegas, Warner Bros. anunció que abandonaba a Toshiba y su HD DVD para pasarse al mundo Blu-ray; dejará de publicar pelÃculas en HD DVD en junio próximo. En los meses siguientes se sumaron Paramount y Universal. Amazon y Wal-Mart confirmaron que desde junio sólo venderán discos Blu-ray. El 19 de febrero último, Toshiba confirmó oficialmente que dejarÃa de desarrollar y fomentar el estándar. En marzo, Acer, Dell y HP, los tres mayores fabricantes de computadoras portátiles del mundo, presentaron equipos con reproductores de Blu-ray integrados. Y el lunes último se disolvió el consorcio HD DVD, que administraba este estándar. El formato dejó de existir oficialmente ese dÃa.
¿Significa esto que los dÃas del DVD están contados? No exactamente. O al menos, falta mucho antes de que quede obsoleto como formato para ver pelÃculas; sà es probable que Blu-ray tenga una adopción más acelerada como estándar de almacenamiento.
La razón está en su propia naturaleza. Blu-ray es un formato capaz de ofrecer video de alta definición; en su máxima calidad, lo que se conoce como FullHD, cada cuadro tiene una resolución de 1920 x 1080 pixeles. Para apreciarlo correctamente hay que tener una pantalla de esa resolución, que todavÃa tiene un precio alto: varios miles de pesos, en el paÃs.
Puede que la pantalla que se tenga sea de alta definición, pero de una calidad intermedia, conocida como 720p (o 720i), lo que implica una resolución de 1280 x 720 pixeles. De todos modos, es mejor que la que ofrece el DVD convencional.
Para aprovechar el video de alta definición que permite Blu-ray, hay que tener una lectora compatible y una pantalla capaz de manejar esa información. En Estados Unidos, los precios de las lectoras más económicas tienen un precio promedio de 280 dólares. Y hay más caras, por supuesto. En nuestro paÃs, el único fabricante que vende estos equipos en forma oficial es Sony; su reproductor BDP-S300 tiene un precio local de $ 2999, un monto similar al que se deberá pagar, en promedio, por un televisor capaz de mostrar esas imágenes, es decir, que cuente con la resolución necesaria y una entrada de videocomponentes: son tres conectores para video, distintos de los tres convencionales de color amarillo, rojo y blanco que usan los DVD y las videocaseteras; o un conector HDMI, un estándar de transmisión de audio y video digital de alta definición.
A esa inversión hay que sumarle las pelÃculas; en Estados Unidos hay varios cientos de tÃtulos ya disponibles en este formato, pero todavÃa son más caros que los DVD. En la Argentina, sólo LK-Tel está editando discos Blu-ray.
Como con el DVD, hay que tener en cuenta el tema de las regiones, aunque es más sencillo: todo el continente americano pertenece a la región A, junto con el sudeste asiático; en la B están Europa, OceanÃa y Africa, y en la C, China, Rusia y el resto de Asia. No obstante, muchos de los tÃtulos ya publicados no tienen región, para facilitar la adopción del formato.
Las lectoras de Blu-ray también pueden reproducir DVD y CD de audio, y ofrecen tres perfiles. BD 1.0 es la primera especificación que permite reproducir el video. Los equipos más nuevos incluyen el perfil BD 1.1, que ofrece la posibilidad de ver un segundo video, del mismo disco, en una ventana en la pantalla: picture-in-picture , en la jerga. El tercer perfil, BD 2.0, también conocido como BD Live, especifica que el reproductor de discos debe ser capaz de acceder a Internet para bajar contenido extra de la pelÃcula. El disco debe ser compatible con estos perfiles para que se activen las funciones extra.
Para las computadoras, el atractivo de este formato, más allá del video, está en su uso como sistema de almacenamiento, ya que es posible guardar hasta 25 GB por capa en el disco; los de doble capa almacenan 50 GB. TodavÃa no es económico; una lectora LiteOn DH-401S interna tiene un precio local de $ 850; además de discos Blu-ray lee CD-ROM y DVD-R/RW; cada disco ronda los 100 pesos.
Las notebooks son una buena manera de entrar en el mundo de la alta definición, con lectoras Blu-ray incorporadas. Algunos modelos soportan sólo 720p (ya es alta definición, pero no la máxima); otros, más sofisticados, permiten ver los videos en FullHD (ver recuadro). Si cuentan con los conectores correspondientes también se pueden usar en conjunto con un televisor de alta definición o, si incluyen una grabadora, hacer grandes backups.
Otra opción la ofrece la consola de videojuegos Sony PlayStation 3, que usa discos Blu-ray para distribuir sus juegos; su gran capacidad le permite almacenar texturas de alta resolución. La PS3 también puede reproducir pelÃculas. Aunque algunos comercios venden el equipo en el paÃs, no cuenta con soporte oficial. La consola Microsoft Xbox 360 ofrece, como complemento, una lectora de discos HD DVD; el 13 de marzo último la compañÃa confirmó que no tiene planes, por el momento, de desarrollar una versión con Blu-ray.
Mientras parte del mundo comienza a hacer su transición a la alta definición, en nuestro paÃs todavÃa hay usuarios que ahora ingresan en el DVD, asà que varios fabricantes están vendiendo en el paÃs reproductores de DVD capaces de hacer un truco digital denominado upscaling ,en inglés, que simula una mejor resolución para los DVD; no es alta definición, pero se ve mejor que la convencional, sobre todo para televisores LCD de gran tamaño.
En definitiva, será cuestión de esperar a que en el mundo se difunda este formato para que baje el precio de los equipos y se ajuste un poco más al bolsillo argentino. La buena noticia es que según la consultora Strategy Analytics, para fin de año en el mundo habrá 30 millones de hogares con al menos un equipo Blu-ray.
Ricardo Sametband
Fuente: La Nación